La historia trata sobre los Niños Llorones que pintó Bruno Amadio ¡Y dio tanto cangelo!, que mucha gente que poseía un cuadro de este tipo se deshizo de ellos mandándolos a la redacción de dicho programa. Desbordados, no tuvieron más remedio que dedicar otro reportaje para intentar suavizar el asunto.
Bruno Amadio, popularmente conocido como Bragolin, fue un pintor italiano afincado en España

Se dice que este cuadro atrae desgracias a quienes lo posean. No obstante, ha sido el cuadro de mayor difusión de este artista, siendo muy solicitadas sus reproducciones en países como España, Inglaterra o Chile, ya que algunos le interpretan una función de protección a los niños pequeños.
En los cincuenta se dieron muchos casos de casas incendiadas donde todo se encontraba destrozado y quemado, cadáveres carbonizados y lo curioso de todo esto es que el cuadro permanecía colgado en la pared sin un solo rasguño. Los psicólogos no hallaron una explicación a este fenómeno, y lo llamaron “La maldición del niño llorón”
Se dice que al ver el cuadro, uno siente como el niño de ojos llorosos y mirada tierna te sigue con la mirada, se siente un ambiente que te pone los pelos de punta. Mucha gente posee este cuadro, pero dice que solo ataca a aquellos que descubren que el cuadro esta encantado, en la noche se escuchan lamentos lejanos, el niño sale del cuadro sube a tu habitación y te quita la vida, si es que no mueres antes de la impresión al ver su rostro endemoniado, luego incendia la casa con todos adentro y borra así la evidencia de su crimen. ¿Verdad… mito…?


