martes, octubre 30, 2007

Un poco de miedín para Halowín.

Como no creo que muchos de vosotros veáis el programa de televisión Cuarto Milenio (ese tan freak que emite La Cuatro con Iker Jiménez los lunes a la una de la madrugada) Os voy a contar la historia de un reportaje que me llamo mucho la atención.

La historia trata sobre los Niños Llorones que pintó Bruno Amadio ¡Y dio tanto cangelo!, que mucha gente que poseía un cuadro de este tipo se deshizo de ellos mandándolos a la redacción de dicho programa. Desbordados, no tuvieron más remedio que dedicar otro reportaje para intentar suavizar el asunto.

Bruno Amadio, popularmente conocido como Bragolin, fue un pintor italiano afincado en España tras la segunda guerra mundial. De fama algo extraña. Es el supuesto creador de una serie de pinturas conocidas como los Niños Llorones. Según la leyenda, este pintor, frustrado por su nula fama como artista, habría hecho un pacto con el Diablo para que sus pinturas fueran bien recibidas por la sociedad. Después de eso, realizó una serie de trabajos en los que destacaba la presencia de niños llorando. Uno de esos cuadros fue realizado a un niño que vivía en un orfanato. Más tarde, el orfanato se incendió con el niño adentro, y desde entonces se ha dicho que ese cuadro en especial adquirió el espíritu del niño.


Se dice que este cuadro atrae desgracias a quienes lo posean. No obstante, ha sido el cuadro de mayor difusión de este artista, siendo muy solicitadas sus reproducciones en países como España, Inglaterra o Chile, ya que algunos le interpretan una función de protección a los niños pequeños.

En los cincuenta se dieron muchos casos de casas incendiadas donde todo se encontraba destrozado y quemado, cadáveres carbonizados y lo curioso de todo esto es que el cuadro permanecía colgado en la pared sin un solo rasguño. Los psicólogos no hallaron una explicación a este fenómeno, y lo llamaron “La maldición del niño llorón”

Se dice que al ver el cuadro, uno siente como el niño de ojos llorosos y mirada tierna te sigue con la mirada, se siente un ambiente que te pone los pelos de punta. Mucha gente posee este cuadro, pero dice que solo ataca a aquellos que descubren que el cuadro esta encantado, en la noche se escuchan lamentos lejanos, el niño sale del cuadro sube a tu habitación y te quita la vida, si es que no mueres antes de la impresión al ver su rostro endemoniado, luego incendia la casa con todos adentro y borra así la evidencia de su crimen. ¿Verdad… mito…?



3 comentarios:

Sarini dijo...

uaaaa, qué miedín, feliz halouín for you también! Yo al iker hasta en la radio, mi secreto peor guardado.

JuanSinMiedo dijo...

jaja otra enganchada a lo misterioso...

Analgesico dijo...

Ay, a mi es que el Iker me parece como tan tarado como el J. J. Benitez pero con más visión comercial.

Que pena lo de Cebrian.